Rafael Hernández Nieto, general en retiro, afrontará su proceso en libertad en relación al caso Ayotzinapa, luego de que una jueza federal modificara la medida cautelar de prisión preventiva oficiosa que le había sido impuesta. Hernández Nieto, ex comandante del 41 Batallón de Infantería de Iguala, enfrenta acusaciones por presunta participación en delincuencia organizada tras haberse reunido, según chats en poder de la Agencia de Antidrogas de Estados Unidos (DEA), con miembros de Guerreros Unidos en 2014.
Raquel Ivette Duarte Cedillo, jueza Segundo de Distrito de Procesos Penales Federales con sede en Toluca, Estado de México, llevó a cabo una audiencia de revisión de medidas cautelares el 20 de agosto, en respuesta a un amparo. El Ministerio Público Federal no logró justificar la necesidad de mantener la medida cautelar de prisión preventiva, por lo que la juzgadora determinó su modificación. En su lugar, se ordenó al general presentarse quincenalmente ante la Unidad de Revisión de Medidas Cautelares y entregar su pasaporte y visa vigente.
Además de la firma periódica, Hernández Nieto deberá proporcionar una garantía de 50 mil pesos. La jueza estableció que no puede salir del país ni del estado de residencia (Puebla) sin previo aviso, y se le prohíbe acercarse a testigos o víctimas. Elena Jaloma Cruz, administradora de la Unidad Especializada en Investigación y Litigación del Caso Ayotzinapa (UEILCA), presentó intervenciones telefónicas realizadas por la DEA a miembros de Guerreros Unidos como pruebas en este caso. Cabe recordar que en junio pasado, la jueza Raquel Ivette ordenó la aprehensión de 16 militares del 27 y 41 Batallón de Infantería en Iguala y, un mes después, dictó auto de formal prisión contra el general Hernández Nieto, quien posteriormente fue recluido en la cárcel del Campo Militar Número Uno.